martes, 10 de marzo de 2009

A ver, jotetes, vamos a dejarnos de pendejadas y vamos directo a lo bueno, ¿va?, fájense sus huevitos y mientras leen vayan pensando de qué pié cojean. Fetiches. Así, como va. F-E-T-I-C......¿H?..... bueno, no importa la deletreada, vamos a escribir sobre aquellos objetos, partes del cuerpo y démases que tanto nos llaman la atención a todos nosotros.



Sí, a todos. ¿Que Juliancito dijo que no tiene?, déjalo, está chaqueto. ¿Marta dijo que eso es para gente enferma?, enciérrate en un convento, estúpida ignorante. Los fetiches nos atacan a todos, hay que reconocerlo, no hay ningún problema en que nos guste algo en especial, por muy asqueroso y retorcido que parezca. Me he puesto a entrometerme en lo que no me importa, y he descubierto que hay tantos y tan diversos que es digna una mención de varios de ellos, saltando los más obvios y recurrentes como caderas o senos grandes o pequeños y esas cosas que ya nos gustan de cajón.


-Oigan, muy chingoncito este gato igualado, ¿no?, ¿porqué no empieza él a decir los suyos?, se cree mucha madre, pero cuándo es con él, le baja a su desma....



Ya voy, ya voy. Ese Russel cuando toma se pone bastante agresivo. Pelirrojas, oh sí, pelirrojas tipo Mary Jane Watson( no la de la película, esa no me despertó ninguna emoción fuera de lo común), esas extraordinarias criaturas víctimas del rutilismo o con un muy buen tinte despiertan mis más bajos instintos, cabellos y cejas al fuego vivo me hacen hervir la sangre. Dejaré que se me baje la erección..... Está bien, continúo.



Una mujer acostada, con su cabello largo y suelto desparramado sobre la cama también me enloquece, más si el cabello es chino o quebrado. Otro más, las chicas de baja estatura, uuuuuhhhh, cómo me encantan las chicas bajitas, son abrazables, hermosas y manejables. Espérenme dos minutos en lo que.... ya. Esos son por ahora los que recuerdo y no necesariamente llevan un orden específico, pero lo interesante viene ahora, ya que al hacer una pequeña investigación acerca de los gustos de tus amigos te enteras de cada cosa.....



Negligés. Algo común, dirán algunos, pero no lo harían si lo hubieran leído de la misma manera en que yo lo leí en el Messenger, un gusto tan pasional que se me hizo ganador de un pequeño espacio en este blog.



Pantalones de vestir negros. Este me hizo pensar bastante y me obligó a recordar que yo lo había visto de alguna manera especial en algún momento de mi vida. Y ahora que me recargo en la silla y veo el techo lo hago: una recepcionista de hospital agraciada por la naturaleza con unos pantalones negros de vestir son como un borracho o un niño, no mienten.



Mujeres con brackets. Éste me hizo pensar aún más. No lo podía comprender al momento en que me lo dijeron, pero bien puede haber alguien que le guste el sabor metálico en un beso. Yo preferiría un piercing en la lengua o el labio.



Monjas. ¿Monjas?. ¡¿MONJAS?!. ¡SANTA BUENAVENTURA ME AGARRE CONFESADO! ¿Porqué alguien querría tener algo con una vieja mujer casada para siempre con el Señor?. Bueno, aunque si fuera bonita tal vez haría una excepción. No deja de ser enfermo.


Pies. Éste me lo contó directamente mi amigo Quentin Tarantino cuando estábamos ebrios y orinábamos las llantas de la Caribe de Robert Rodríguez. Aunque pensándolo bien éste fetiche merece una entrada completa, ustedes dirán.


Tacones altos. De ésto me comentó un poco mi amigo ardilla, que según nos gustaban porque las monas levantan el trasero en onda de apareamiento. En lo personal pensar en monas me enferma, como las monjas.................................... aunque sería interesante enseñarle cosas pecaminosas a una chica de aquellas.............


Chicas alemanas con uniformes de basquétbol aventándose excremento entre ellas. Chale, ese Russel cuando toma, además de violento se pone medio enfermo.


Así es señoras y putetes, si por alguna razón tienen la mala suerte de leer esta chingadera, pongan cuáles son sus gustitos desviados, no sean maloras, nada más no vayan a poner un fetiche inmoral y vomitivo con una monja pelirroja a la que le arrancas el hábito con violencia, la tiras a la cama y sus rojos cabellos caen incadecentes como el sol sobre la cama siendo Jesús crucificado el único testigo de.................... Esperaré a que baje la.............. No, ésta sí que va a tardar un buen rato.....

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y QUE DICES DE LOS FETICHES CULINARIOS? ESOS DE LA COMIDA PALOS QUE SE ESTÁN CONFUNDIENDO. ESO DE TOMAR A JUSTINA POR EL PIE Y DECIR: TU PIE TTTUUU PIIIE TU PIE Y ACARICIARLO CON VEHEMENCIA. ESA VEZ SI TE PASASTE COMO NO QUERIAS QUE SE ESPANTARA!! QUE BUEN BLOG. NOS VEMOS CHICA.